Existen masajes gay que están pensados para personas de esta condición sexual que quieren disfrutar de una terapia erótica y placentera. Son masajes un tanto diferentes y con características particulares, por eso, a continuación queremos que descubras mejor en qué suelen consistir este tipo de masaje.
Aquí te desvelaremos las principales características de los masajes gay y que, en menor o mayor medida, se suelen aplicar en la gran mayoría de los centros de masajes eróticos. Un masaje que te hará vibrar de pies a cabeza y con el que vivirás un momento de máximo erotismo y placer.
5 características de los masajes gay que tienes que conocer
La principal diferencia de este tipo de masaje está clara: el masajista siempre será del mismo género que el cliente/a. De esta manera, se vivirá una experiencia totalmente adaptada a los gustos de la persona que recibe el masaje. Pero además de esta característica obvia, hay otros elementos que hacen que estos masajes sean inolvidables. Son los siguientes.
Masajes tántricos
Normalmente, los masajes gay que se suelen ofrecer son del tipo tántrico. El motivo es que con esta técnica se consigue estimular sobremanera el cuerpo sin necesidad de penetración. Estos masajes lo que hacen es activar la energía sexual que hay en el cuerpo para “despertarla” y hacer que se pueda vivir una intensa experiencia que conecte mejor el cuerpo con la mente. Existen muchos tipos de masajes que puedes escoger pero, por lo general, el tántrico es el más recomendado para que vivas un despertar sexual increíble.
Activación del punto G masculino y femenino
Otra de las características de los masajes gay es que durante las sesiones, el masajista se encarga de activar uno de los puntos erógenos más placenteros del cuerpo y que pocos sabemos estimular correctamente. Hablamos del punto G tanto masculino como femenino. Durante los masajes, todo el cuerpo se activa y la sangre fluye por todo el cuerpo para conseguir despertar todos los puntos erógenos del cuerpo y, entre ellos, se da una mayor importancia al punto G por ser uno de los más excitantes.
Masaje cuerpo a cuerpo
Los masajes gay por excelencia también suelen contar con un contacto directo con el masajista. En estos casos, no hablaríamos de un masaje tantra sino de otra tipología de técnica que hace que el placer sexual se active por el contacto con la piel del masajista. En estos masajes, el cuerpo se estimula por el roce, las caricias y el contacto con el cuerpo desnudo del masajista. Una experiencia increíble que despierta todos los sentidos.
Ambientación íntima y relajante
Este tipo de masaje especialmente pensados para gays se llevan a cabo en un entorno íntimo y muy acogedor. La luz tenue, la música relajante y los aromas son esenciales para conseguir que la experiencia sea realmente beneficiosa para el cuerpo. Con todos estos elementos, se consigue crear una atmósfera alejada de la cotidianeidad y totalmente adecuada para la entrega total al placer.
Estimulación de todo el cuerpo
Y, por último, otra de las características de los masajes gay es que se busca la sexualidad y el erotismo en todo el cuerpo. Es decir, se deja de lado la estimulación única de los genitales para que, así, se pueda descubrir que en todo el cuerpo reside placer y excitación. Una técnica perfecta para reconectar con tu cuerpo y con tu potencia sexual.